Free counter and web stats

sábado, 27 de agosto de 2011

Con un par




"Con un par". Eso mismo fue lo que pensé al leer la siguiente noticia: “Una concejala se va en mitad de un pleno para acudir de público a 'Sálvame'”. Me pareció la típica noticia que cuelan en los periódicos el día de los “Santos Inocentes”. Pero eso es en diciembre y estamos en verano…
Me decidí a seguir leyendo, y la noticia no tenía desperdicio. Noemí Martínez, delegada del área de Bienestar Social y séptima teniente de alcalde de Manises (Valencia), abandonó su segundo pleno como concejala para acudir de público al programa de Telecinco “Sálvame Deluxe”. “Tiene más poder la ‘Princesa del Pueblo’ que el alcalde de Manises” fue lo primero que pensé. Y me indignó. Se supone (y parecer ser que sólo se supone) que los políticos que nos representan, independientemente del nivel del cargo que desempeñan, deben dar una buena imagen de nuestro país y de sus gentes. Y, aunque este tipo de programas tienen bastante éxito (¡qué horror de autorretrato de España!), no me parece lugar para un político que se precie. Pero lo que más me sorprendió fue lo que leí a continuación: ¡el alcalde dio su consentimiento para que la concejala abandonase el pleno! Y no sólo eso, es que desde el Ayuntamiento declararon que estaban “muy orgullosos de que saliese en la pantalla detrás de Kiko Matamoros”.



¡Alucinante! Esta señora no conseguirá salvar el medio ambiente, pero ha conseguido que Jorge Javier anunciase en directo que el público venía de Manises. Y, además, al estar colocada en primera fila, Noemí salía en pantalla en todos los planos del colaborador. Y eso a su Ayuntamiento le gusta. A lo mejor el próximo pleno lo hacen en “La Noria”…

El revuelo que se formó con esta noticia fue tal que la propia concejala intervino en “Sálvame” para aclarar que no abandonó el pleno al principio, sino cuando ya llevaba una hora. Y dijo además que ese viaje estaba planeado antes de que ella fuese elegida como edil de Manises.
Me deja mucho más tranquila saber que esta señora (que, por lo que he leído, parece ser que cobra 35970,13 euros brutos anuales por su dedicación exclusiva al ayuntamiento) fue capaz de aguantar una hora en un pleno, cuando hay unos 5 millones de personas que estarían dispuestas a pasar 8 o 10 horas al día trabajando en lo que sea por un sueldo mileurista, e incluso a veces por menos. Y lo más gracioso es que Noemí Martínez dice que ella es concejala las 24 horas al día y los 365 días del año. Pues seguro que tiene un montón de horas libres para ir donde quiera. Pero abandonar un pleno por semejante asunto… Pero bueno, tampoco vamos a lincharla por esto. Es normal que lo haga, pensará que es lo correcto. Seguro que ha visto cómo está el Congreso los días que hay fútbol… Y dice el refrán que “donde fueres, haz lo que vieres”.


Pero aquí no acaba la cosa. Entre concejales anda el juego. Días después leí el siguiente titular: “Nombran a un pirómano concejal de Medio Ambiente de un pueblo de Cantabria”. Mi pensamiento fue otra vez el mismo: “Con un par”.  Resulta que, según explicaba el diario, el recién nombrado concejal de Medio Ambiente, Urbanismo y Obras Públicas “fue condenado en sentencia firme por un delito de incendio forestal por provocar en 2001 cuatro fuegos que quemaron cinco hectáreas de arbolado. La condena fue de seis meses de cárcel y una multa de 1800 euros”.



“¡Madre mía! ¡La cantidad de terrenos que van a recalificar en Las Rozas de Valdearroyo!” pensé. “O eso o el alcalde estaba de público en ‘Sálvame’ mientras se nombraba a los concejales. Pero ya se me ha despejado la duda. El alcalde declaró que no sabía que el edil había sido condenado y que el equipo de gobierno tomaría una decisión sobre su futuro después de escuchar a todas las partes.
Finalmente el concejal dimitió, pero intentó salir con la cabeza bien alta: “Que quede claro que dimito como concejal porque quiero”, afirmó. El exconcejal también quiso dar su opinión sobre lo acaecido: “Sacar a la luz una sentencia de 2006 es una venganza ruín del anterior alcalde, Rubén Pérez, y de su partido, el PRC. […] Ya me advirtieron que me iba a arrepentir si no les apoyaba”. No sabemos si será verdad o no. Pero intentar limpiar la imagen propia a costa de ensuciar la de los demás no me parece de ser buena persona. Pero sí muy típico de los políticos. Lo que no sé es por qué este hombre aceptó precisamente ese cargo… ¿no podía haberse encargado, por ejemplo, de la concejalía de festejos? Sí, justo esa que contrata los fuegos artificiales…

Los concejales del Partido Popular están en boca de todos. ¿Será la estrategia del partido esa de “que hablen de ti, aunque sea mal”? Dicen que “en todos lados cuecen habas”, pero el resto de los partidos de momento está sabiendo mantenerse en la sombra, bien por falta de escándalos o bien porque saben “nadar y guardar la ropa”. Sea como sea, viendo cómo está el patio habrá que pensar muy bien a quien votamos el próximo 20-N.

1 comentario:

  1. Pues sí, muchos políticos parece que toman sus decisiones siguiendo el razonamiento de "con un par" y sin tener en cuenta lo que representa un cargo público

    Julián

    ResponderEliminar

Deja tu comentario